Dudas en el aire…

Kaley Cuoco tiene condiciones especiales que no se dan en cualquier actriz. Aparte de una gran belleza y talento, posee lo que podríamos llamar “ángel” o “carisma”. Ese portento invisible que cae bien a multitudes de ambos géneros y culturas. Aunque seguramente le resultará muy difícil (por no decir imposible) separarse de su trascendente papel en The Big Ban theory, esta californiana de sonrisa encantadora hace todo lo posible para alejarse de esos fabulosos tiempos, prueba de ello, es su último protagónico en la serie The Flght Attendant de HBO Max.
El argumento no dista mucho de otros cientos que pululan en el streaming: el protagonista se ve involucrado en un crimen que no cometió y tiene que esconderse hasta probar su inocencia. Lo novedoso de esta historia (basada en la novela homónima de Chris Bohjalian) es que la víctima asesinada ayuda a la azafata Casandra Bowden a descubrir al verdadero culpable por medio de deducciones a lo Sherlock Holmes. La historia tipo thriller se complica por el alcoholismo crónico de su protagonista y una intrincada red mafiosa que la quiere muerta y enterrada, al igual que todos los acontecimientos que ha provocado. El resultado es fresco y entretenido. La propia Kaley ha sido productora ejecutiva y show runner del seriado, por lo que se ve todo su empeño en que el dramatizado salga airoso en los contadores de streaming. Parece que lo ha logrado porque ya se confirmó la segunda temporada por parte de HBO Max.
La Cuoco pertenece a esa nueva generación de actrices independientes, liberales, empoderadas y decididas que el movimiento #metoo y la modernidad han traído a Hollywood. Ahora podemos ver muy seguido a heroínas imperfectas pero poderosas tomar las riendas de sus vidas y llevar a cabo planes imposibles con mucha convicción. En el apartado latino está sucediendo exactamente lo mismo: Skyrojo, Vis a Vis por solo nombrar dos.
Las historias de azafatas siempre tienen un halo de misterio. Estas hermosas mujeres que viajan por todo el mundo y que hacen del aire su hogar, sin duda tienen muchas historias locas que contar. Esta es una de ellas y realmente pasa de todo, como nos gusta a los espectadores. Un punto a destacar es el gran manejo visual (incluido el intro) con planos extraños que nos podrían llevar a pinturas surrealistas y los personajes secundarios bastante bien trabajados y atractivos, por lo que se convierten en un complemento importante y categórico.
En definitiva, The Flight Attendant nos muestra a Kaley metiéndose en muchos problemas mientras nosotros nos perdemos en sus ojos azules. Lo acepto, soy fan. ¡Ahora a disfrutar!
Te dejo con alguna memorabilia de su paso por la sitcom más aclamada de los últimos años.

Merchandising

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *